Nunca me dejes ir

 Te ruego me mires de frente

atrévete a no correr

apunta tus ojos a mis rizos 

como cuando miras al sol 

con la esperanza que ilumine tu decisión 

llevamos suficiente tiempo aquí 

damos vueltas sentadillas 

cargamos más que ayer 

me aterra que un par de días somos uno 

tan apasionante sube y baja

montaña rusa de placer y vaivén 

que termina entre semana 

viendo tu espalda alejarse de mí 

desde hace tiempo algo no es igual

te quiero todavía

mi forma de decirlo no es decir te amo y seguir con mi día 

temo que ya no seas feliz 

que yo no sepa mentir 

me acostumbré a ser diferente 

decir claramente que no pienso huir

mi piel no quiere resignarse 

hacer sin ti lo que me satisface 

aun quiero compartirte tanto 

pero odio que siempre venga el llanto 

el límite es no permitirme sufrir

no quiero verte tan lejos aun tomando tu mano

no puede ser pero lo eres todo para mí 

quiero que quieras ayudarte mi amado

nadie sana si no lo quiere por sí 

acaso no conoces ya mis ganas de bañarme en gasolina

prenderme el cabello 

ver si con mi humo te llega la señal

que no tenemos que estar todo el tiempo

sólo basta ser honestos 

sin ti no quisiera construir

jamás podría desamarte 

quiero llegar a ser lo que piensas de mí 

la gente del público dice que parezco valiente 

quiero creerles pero parece ser sólo un personaje 

que todo parece fluir

pero me lleno de terror si parece que finjo sonrisas

crees que me voy a ir 

pero me sigo reparando 

pues nada es nuestro 

empiezo a querer tomar un cuchillo y abrir esto 

mas no creo ser capaz de seguir el juego de un extraño

mi cuerpo sólo sabe moverse a tu ritmo

estoy cansado de costarme respirar

no distingo si esto es un sueño 

sólo tú crees que soy de hierro

yo ya no sé ni qué quiero 

si saltar o ir de nuevo 

a cada lugar donde tu mirada me animaba

buscar escondites 

donde decirnos todo lo imposible 

soñar con ser visibles 

que mis poemas sean misiles

acompañarnos a la luna 

hasta hacernos de día 

sin ningún secreto 

dentro de tus brazos 

cuando no pensé que un día te pediría

no te alejes vida mía.

               -Rhye Anand, tu sirena nb

Comentarios

Entradas populares